Mónica Alonso, de Paraná, fue galardonada en Caminos y Sabores por producir la mejor miel del país, fruto de una pasión familiar que transforma desafíos en variedades únicas y un compromiso inquebrantable con el consumidor.
La apicultura en Argentina tiene nombre de mujer, y ese nombre es Mónica Alonso. Desde Paraná, Entre Ríos, esta emprendedora lidera "Miel Nativa", un proyecto familiar con más de dos décadas de historia que recientemente fue reconocido en la prestigiosa feria Caminos y Sabores de La Rural, llevándose el premio a la mejor miel del país. Pero detrás de este dulce galardón hay una historia de resiliencia, pasión y una visión clara que desafía los modelos tradicionales.
Un Camino Forjado con Pasión y Resiliencia
Mónica cuenta que "Miel Nativa" surgió de un momento de profundo cambio personal. Tras el fallecimiento de su marido, y con hijos muy pequeños, fue su hija, de tan solo 13 años, quien la impulsó a seguir adelante con las pocas colmenas que tenían. "Mamá, hay que seguir", le dijo, y esa frase se convirtió en el motor para transformar un pasatiempo en un proyecto de vida.
Lo que comenzó en Entre Ríos, pronto se expandió con una curiosidad insaciable por la diversidad. Mónica investigó y descubrió que en otras provincias podía obtener diferentes tipos de miel, con rendimientos distintos a los de Entre Ríos, donde las fumigaciones a menudo complican la producción. Así, su búsqueda de la excelencia la llevó a expandir sus apiarios a lugares tan diversos como Santiago del Estero, el norte de Santa Fe y Tucumán.
El Fascinante Mundo de las Mieles Monoflorales
La pasión de Mónica por la apicultura es contagiosa, especialmente cuando habla de la increíble variedad de mieles que produce. "Hoy en día hago seis variedades de miel y voy por más", afirma. La diferencia no es solo un matiz; es un universo de sabores, colores y texturas.
Mónica subraya que, si bien toda miel pura es un tesoro de propiedades nutritivas (es una fuente de proteínas, tranquilizante y cicatrizante), la floración es la clave que define su identidad. "Hay muchas diferencias de color y sabor según la floración, muchísimas", asegura.
De la Colmena al Consumidor: Una Elección Consciente
A diferencia de muchos productores que optan por vender a granel a exportadores, Mónica tomó una decisión audaz hace años: priorizar el contacto directo con el consumidor. "Decidí hace muchísimos años no exportar... yo quise valorarme a mí misma y valorar el trabajo que hago", explica. En lugar de buscar la mayor cantidad de colmenas, se enfoca en apiarios más pequeños, de 70 a 80 colmenas, para asegurar la calidad y diversidad.
Su modelo de negocio la lleva a participar en ferias, desde las más grandes como Caminos y Sabores hasta las barriales, además de utilizar las redes sociales. Su objetivo es claro: "cortar también esa cadena de encarecimiento... quiero vender directamente la producción directamente al consumidor". Esta cercanía le permite educar al público sobre las variedades de miel y derribar el mito de que "miel es miel". "La gente queda alucinada, realmente no sabía que había variedades de miel", comenta con entusiasmo.
El Desafío y la Recompensa de una Vida Apícola
El camino de Mónica no ha sido fácil. Implica viajes constantes, jornadas extenuantes y el enfrentamiento con condiciones climáticas extremas. "He cosechado con 52 grados de temperatura, he caído de rodillas totalmente descompensado de los calores", relata. Sin embargo, su amor por las abejas, a las que describe como "nuestras salvadoras del planeta" por su rol en la polinización del 85% de lo que consumimos, es su motor.
El reciente premio en Caminos y Sabores no fue solo un reconocimiento a la calidad de su miel, sino también a su "constancia, a la perseverancia, a los llantos cuando no tenemos cosecha". Es el resultado de miles de kilómetros recorridos, de la soledad de la ruta y de la convicción de que "se puede lograr". Mónica, como mujer sola, ha demostrado que con salud y muchas ganas, todo es posible. Su mensaje a otras mujeres es un llamado a la acción: "que se animen, que todo es posible en esta vida".
Miel Pura: Un Tesoro que No Caduca
Durante la entrevista, Mónica despejó una duda frecuente sobre el almacenamiento de la miel. Enfatizó que la miel pura es un alimento que "jamás caduca". Se puede conservar fuera o dentro de la heladera, en frío o calor, sin perder sus propiedades. Lo único a considerar es que si se deja afuera, pueden aparecer hormigas y tardará un poco más en cristalizar. La cristalización, lejos de ser un signo de deterioro, es una prueba de su pureza.
Finalmente, Mónica lanzó un mensaje a quienes no consumen miel o la consumen poco. Sugiere reemplazar otros endulzantes por la miel, destacando sus innumerables beneficios para la salud. Además, brindó un dato crucial: para aprovechar todas las propiedades de la miel, no debe exponerse a temperaturas superiores a los 60 grados. Por ello, al endulzar infusiones, es fundamental esperar a que el líquido esté tibio.
Con el premio en sus manos y la emoción a flor de piel, Mónica Alonso de Miel Nativa no aspira a grandes corporaciones, sino a seguir en el campo, junto a sus abejas, produciendo este "alimento que jamás caduca". Su mayor premio es el abrazo y la felicitación de sus hijos, quienes la vieron llegar a "lo más alto en la producción de miel". Un ejemplo de cómo la pasión y la perseverancia pueden transformar un emprendimiento familiar en un referente nacional.